(cuentito sufi)
Mulla Narusdin se cayó de una escalera y se hizo mucho daño. A pesar de los emplastos y de las pociones, el dolor le hacía sufrir terriblemente. Sus amigos fueron a consolarle:
-¡Hubiera podido ser mucho peor! – dijo uno.
-Después de todo, no te has roto nada-dijo otro.
-Pronto te repondrás –dijo un tercero...
En el colmo del dolor, Nasrudin se puso a pegar alaridos:
-¡Salid todos de aquí! ¡Abandonad esta habitación en el acto! ¡Mujer¡ no dejes entrar a nadie a menos que se haya caído alguna vez de una escalera!
Wednesday, May 03, 2006
Subscribe to:
Post Comments (Atom)
No comments:
Post a Comment